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Se utilizaron un total de 84 madres y sus camadas, divididas en tres grupos. Los animales se agruparon según el día de parto y número de partos y fueron adjudicados a uno de los cuatro tratamientos experimentales. Los tratamientos experimentales consistieron en: pienso de lactación (ad libitum vs. Restringido) y pienso de pre-iniciación (presencia vs. ausencia). La dieta de lactación se ofreció en forma de harina y la dieta de pre-iniciación en forma de granulado. Los lechones se pesaron individualmente a los 3, 7, 14 y 21 días. La cantidad de pienso de pre-iniciación consumido fue determinado diariamente. El peso de la madre y el espesor de grasa dorsal a nivel de P2 fueron determinados antes del parto y al destete.
No se observaron interacciones entre el consumo de pienso de lactación de las madres y el consumo de pienso de pre-iniciación de los lechones (P>0,05). Las cerdas alimentados ad libitum perdieron menos peso (P<0,01), mejoraron la ganancia de peso total (P<0,04) y diaria (P<0,04) de los lechones y aumentaron (P<0,03) el porcentaje de cerdas salidas en celo después del destete comparado con las cerdas que fueron alimentadas de forma restringida. El consumo de pienso de pre-iniciación no presentó efectos (P>0,30) sobre el peso de las madres ni sobre el espesor de grasa dorsal, pero aumentó los días de salida en celo posterior al destete (P<0,03). El pienso de pre-iniciación tendió a mejorar el peso de la camada al destete (P<0,09) y reducir la mortalidad después de las adopciones (P<0,06).
Se puede concluir que un bajo consumo de pienso durante la lactación afecta negativamente tanto a la productividad de la madre como a la de sus lechones, mientras que el pienso de pre-iniciación para los lechones no mejora significativamente el peso de los lechones durante el período de lactación ni la productividad de la madre.
RC Sulabo, MD Tokach, JY Jacela, EJ Widemann, JL Nelssen SSDritz, JM DeRouchey and RD Goodband (2007), Kansas State University, Swine Day, 24-37.
